Trías de Bes: "Un emprendedor no se hace en una escuela de negocios"

Fernando Trías de Bes sostiene que "un emprendedor no se hace en una escuela de negocios, porque emprender es un acto emocional" y alerta sobre las ilusiones mal gestionadas y los socios desacertados. El economista, profesor de Esade, especialista en mercadotecnia, creatividad e innovación, llenó ayer por la tarde la sala polivalente del auditorio Príncipe de Asturias: 545 personas, según fuentes de la organización, asistieron a su conferencia, programada dentro de las actividades del plan de emprendedores del Ayuntamiento de Oviedo y que, con la afluencia de público y la cola formada a la puerta, retrasó su comienzo quince minutos.

Trías de Bes, con un discurso didáctico, muy cercano y salteado de bromas y curiosidades, desmontó tópicos sobre los emprendedores. Tras un chiste a cuenta de su primera conferencia, a la que sólo acudió una persona, se lanzó a analizar algunos datos sobre emprendimiento y fracaso. "Banesto baraja que solo el treinta por ciento de los proyectos empresariales culminan", indicó, mostrando los datos de un informe de la entidad bancaria en la pantalla que se alzaba tras él, sin embargo, -y destacó la paradoja- "sólo el 0,02 por ciento de la investigación empresarial está dedicada a entender el fracaso".

Contó su propia experiencia. Explicó que montó una empresa con 26 años, cien mil pesetas y un socio y que pasó por "la travesía del desierto", y llegó a tener cincuenta empleados. "Tuve aciertos", dijo, "y muchísimos fracasos", reconoció.

Los fracasos más comunes, señaló, suelen estar causados por cuestiones "mundanas, que no se enseñan en las escuelas de negocios". Emprendió su propia investigación y descubrió que "lo que más explicaba los fracasos tenía que ver con la ilusión. La ilusión es un motor, pero también un espejismo que ciega al más avezado ejecutivo". "Un emprendedor es un gestor de ilusiones", declaró.

De Bes desmitificó el poder de las ideas. "Eso de que quiero emprender porque se me ha ocurrido unas idea es una chorrada. La idea tiene su valor, pero no es el motivo, es el vehículo", expuso, y siguió enumerando una larga lista de motivos equivocados para emprender: no encuentro trabajo, odio a mi jefe, me gusta una actividad y nadie me la compra o me cuesta levantarme por las mañanas. Respondió a las risas de sus oyentes con explicaciones sobre el "síndrome del domingo por la tarde" y citando a Javier Marías que, contó, "dice que se hizo escritor porque le costaba madrugar". El propio Fernando Trías se puso como ejemplo. "Yo emprendí por uno de los motivos lamentables: odiaba a mi jefe", confesó.

En cualquier caso, indicó, "el motivo es la chispa, pero lo necesario es la motivación, desear que esa sea tu forma de vida". Tiene algo que ver, dijo, con lo que siente un bombero que ama su profesión y está deseando trabajar, o con el deseo de construir algo.

Por otro lado, advirtió de que "la seguridad total no existe y el emprendedor debe abrazar la incertidumbre". "La felicidad requiere que el futuro sea incierto, la vida es incertidumbre", añadió, e invitó a su auditorio a imaginar lo aburrido que resultaría un mañana absolutamente predecible.

Por supuesto, admite Trías, no todo el mundo tiene un carácter emprendedor. En ese caso, el éxito requiere "un espíritu luchador, ser un fajador, tener espíritu combativo". "Emprender es muy duro, requiere ilusión y espíritu de lucha", según el economista, y desde luego, "cometer grandes errores".

Elena FERNÁNDEZ-PELLO

Fuente: http://www.lne.es/oviedo/2013/10/15/trias-bes-emprendedor-escuela-negocios/1483993.html?utm_medium=rss