Oportunidades que se esconden en cada fracaso

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   Viernes, 04 de Noviembre de 2011

Para hacer bien las tareas y llegar al éxito empresarial, muchos son los desafíos que todo emprendedor debe superar para realizar el sueño de ser empresario. Sin embargo, tomar este camino puede ser bastante estresante. Por ello, ser gerente, empleado y vendedor de su propio negocio no es tarea fácil.
Hay muchas decisiones difíciles de tomar, mucha información que valorar y no siempre uno es experto en la materia. A esto se suma la gran responsabilidad de ser la cabeza de un plan y se necesita de estrategias para avanzar.
Inclusive, es necesario mencionar que un proyecto podría generar bastante tensión, lo que hace que el asunto que muchas veces el emprendedor vea sólo los obstáculos y comience a cerrar su mente. Entonces, se pierde el ángulo de visión, perspectiva y capacidad de ver las opciones y/o soluciones.
A partir de aquí, la creatividad es clave para emerger del lodo y llegar al paraíso. Por las diversas experiencias de distintos emprendedores se ve un patrón, tanto en los negocios como en otras áreas de la vida, los que hacen realidad sus sueños, y abordan situaciones que no las detienen sino, por el contrario, refuerzan sus ideales.
No existe un secreto general para todas las personas, pero si existe una actitud que pondera en cada una de ellas, a fin de tomar en cuenta a cada emprendedor se citan algunos consejos a considerar al momento de tomar la decisión, ya sea de emprender un camino independiente, de reinvertir, o de querer abandonar por un problema el negocio propio.

 ACTUAR 

Un emprendedor hace lo que tiene que hacer inmediatamente, no se detiene, no deja pasar para otro momento sus obligaciones. Una vez analizado y revisado el asunto, es necesario actuar y no dar vueltas. Aquí es importante resaltar que una vez tomada la decisión es preciso acatar las responsabilidades que acarrean.
El pesimismo no forma parte del pensamiento de los emprendedores, entonces, por defecto no se enfocan sobre las negatividades y se ocupan de las cosas, en lugar de gastar tiempo en lo que podría o no ocurrir elaborando circunstancias en la cabeza que lo desvían de su propósito.
 También, conocen sus límites y conviven bien con eso, buscando constantemente oportunidades, por eso, ordena sus prioridades, las asumen y las delegan: si no puede hacer algo lo admite y lo resuelve de inmediato.
El emprendedor, busca información todo el tiempo, y conoce a la persona adecuada para cada caso. Tampoco teme preguntar e indagar, y utiliza los recursos de su red de contactos.
La mente de un emprendedor con éxito, siempre está llena de ideas positivas, constructivas y su espíritu irradia una luz propia. En tanto que, la coherencia, es como la columna vertebral para salir adelante, el cambiar de línea de acción o de pensamiento cada rato ocasiona dudas, y genera ansiedad.
 Multiplicar las fuerzas y crear sinergias es otro valor agregado de los emprendedores exitosos, A esto se suma la elaboración de una estrategia empresarial adecuada que debe basarse en un modelo de negocio sencillo, claro, sostenible, sin complicaciones se logra mucho más.

CONTROL EMOCIONAL
Otra característica clave, es el de saber gestionar las emociones, la mayoría de los emprendedores que superaron obstáculos tienen grandes habilidades sociales para las relaciones con los demás y manejar la ansiedad, las preocupaciones, el estrés y otros agravantes al momento de pelear por el sueño anhelado.
Los éxitos también se miden de acuerdo a la calidad de trabajo, produciendo buenos productos o servicios aumentará los clientes y la fidelidad de estos. Por otro lado, tener otras actividades y abocarse a ellas es una parte de la vida del éxito, por ello hay que aprender a saber desconectarse del trabajo.
 Aprender de los errores, este sería uno de los factores que nunca hay que olvidar, porque de los ellos se aprenden, y en vez de ver una situación difícil como una amenaza para la estabilidad del negocio, hay que verlo como una oportunidad para aprender a ser mejores. Aprender forma parte de la vida, por eso, uno mismo no debe recriminarse las faltas, ni tampoco a los demás profesionales con los que se trabaja.

 ENFOCARSE
 

Ahora bien, cuando hay que moverse en terreno en el que no son expertos, calmar la mente para estar más atentos es la mejor estrategia a aplicar. Es preciso enfocarse sobre el momento presente, abordando cada vez una sola cosa o asunto, uno después de otro, sin pretender hacerlo todo de una vez.

Dar lo mejor de mismos hasta el final y no desalentarse ante el fracaso es de sabios, hay que entender que cada oportunidad está dentro de cada fracaso y la solución sólo aparecerá si se mantiene la calma para encontrar la salida. Saber gestionar las emociones y disponer de una conciencia más plena del estado mental y del cuerpo es una habilidad que lleva a tener la mente más centrada en el momento presente.

 Aprender a crecer 
Problemas, obstáculos o circunstancias difíciles sólo son oportunidades para el aprendizaje. Para un emprendedor exitoso no existen barreras o motivos para desalentarse, cada desafío lo vive y lo afronta con positivismo.

Nueve valores del espíritu emprendedor
Creatividad - Autonomía - Confianza en uno mismo - Tenacidad - Responsabilidad - Capacidad para asumir riesgos - Liderazgo y Espíritu en equipo

Fuente: www.5dias.com.py